El sueño
“Soñé que un niño me comía. Desperté sobresaltado. Mi madre me estaba lamiendo (licking). El rabo (tail) me tembló (shook) todavía durante un rato (for a while)”
Autor: Luis Mateo Díez.

Consejos para escribir un buen microrrelato:
1- Piensa en un suceso o anécdota que te haya ocurrido o conozcas.
2- Reflexiona sobre el hecho.
3- No intentes realizar un resumen de una historia larga, sino “visualiza” la brevedad desde el principio.
4- El relato tiene que tener un mensaje o moraleja oculta sobre el que reflexionar.
5- Una vez elegido el acontecimiento que se va a contar y el mensaje a transmitir, tienes que pensar “Cómo” vas a contar la historia, con el objetivo de enganchar y sorprender al lector. Lo más importante es tener claro el principio y el final de la historia.
6- ¿Cómo conseguir sorprender al lector?
Contando lo esencial e imprescindible dando rienda suelta a su imaginación.

Volvemos al microrrelato de Augusto Monterroso para analizarlo
“Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí”

Este microrrelato, como casi todos los demás, tiene la secuencia lógica o tradicional de cualquier historia: principio, desarrollo y final. La diferencia es que el autor ha ocultado intencionadamente dos de estas fases para que el lector las imagine:

Principio: alguien se durmió (oculto)
Desarrollo: esta persona tuvo un sueño mientras dormía (oculto)
Final: cuando esta persona despertó, su pesadilla-problema continuaba (expresado)

El microrrelato es un género interactivo, donde el autor debe ser sintético para sugerir y el lector debe completar significados. Piensa, por tanto, qué partes de tu historia debes mostrar y qué partes debes sugerir.

Espero que este post os haya ayudado y apliquéis los trucos para conseguir un microrrelato perfecto.

¡Un saludo amigos!